Agricultores Se Trasladarán A Caracas Para "Salvar" La Producción Nacional
Publicado el 22 de abril de 2015 a las 19:08
(María Beatriz Parilli)
Por una comida producida en el país,
agricultores del estado Portuguesa abandonaron su labor matutina del campo para
llevar a cabo una gran asamblea en el sector La Flecha, en Araure, donde
acordaron realizar dentro de una semana una movilización nacional en Caracas,
para exigirle al presidente Nicolás Maduro incentivos al sector que urge de
precios justos, insumos y otros recursos para aumentar la producción de
alimentos que demandan 30 millones de venezolanos.
Debajo de la pasarela en la que se lee
“Portuguesa potencia agroindustrial”, se concentraron alrededor de 500
productores de distintos rubros, que fueron convocados por Fevearroz, Fedeagro
y Fesoca, cuyos respectivos presidentes Fuaz Kassen, Antonio Pestana y José
Ricardo Álvarez, dirigieron lo que catalogaron una “expresión pacífica de
reclamo”, acción que fue respaldada por el titular de Fedecámaras en
Portuguesa, Omar El Chumary, por considerar que se está destruyendo el aparato
productivo.
Las pancartas y volantes que
repartieron los productores daban cuenta de las peticiones del sector:
Incremento de precios a las cosechas de arroz, girasol, caña de azúcar y a la
venidera de maíz, así como la distribución a tiempo y suficiente de insumos, y
la sustitución de la agricultura de puertos por lo “Hecho en Venezuela”,
factores que actualmente signan el ciclo norte-verano y el próximo período de
invierno.
Los dirigentes gremiales aseguraron
que, en promedio, el abastecimiento de insumos (semillas, fertilizantes y
agroquímicos) para la siembra de maíz del ciclo invierno no pasa el 30%, y que
no pueden “sobrevivir” con un margen de pérdida de 60%, 40% y 37% que les dejan
los actuales precios del girasol, arroz y caña de azúcar.
El presidente de Fevearroz indicó que
estas condiciones son generalizadas en la mayoría de los rubros agrícolas y que
no es un caso aislado que las cosechas no tengan precios acordes a los costos
de producción, pues es una manera de favorecer las importaciones de las que
hace más de 50 años se lucran las mafias enquistadas en los sectores públicos y
privados, a cuestas del patrimonio petrolero nacional -a pesar de que ahora no
hay recursos de dónde sacar divisas- y en detrimento de la economía agrícola
del país.
Durante la asamblea, Kassen dejó claro
que el abastecimiento de alimentos no está en los puertos sino en las fincas de
los agricultores, a los que agradeció y les dijo que “no tienen idea de lo que
hemos aguantado y tolerado siempre cultivando un diálogo con compromiso; no
hemos sido lo suficientemente honestos con ustedes porque sabemos que si lo
hacemos van a rebasar la paciencia y las acciones pacíficas que se merece el
país para resolver estos problemas”.
Sin embargo, Kassen cree que hay tiempo
de que se tomen decisiones para no afectar la producción de rubros como el
arroz que es uno de los pocos cultivos en los que Venezuela está cerca de
satisfacer la demanda interna. “No podemos hablar de un compás de espera sino
de compromiso. Cada día nuestro compromiso es mayor y esperamos que el
compromiso del Ejecutivo se puntualice, defina y se ponga en práctica”.
En la concentración, los dirigentes
gremiales se solidarizaron con los 300 productores de Guárico que se
movilizaron ayer en Caracas, al tiempo que rechazaron que mientras los
agricultores de Portuguesa desarrollaban un acto pacífico, en la capital del
país algunos personeros del Gobierno expresaron que estaban cerrando el
tráfico, lo que no sucedió en ningún momento.
Al referirse a las declaraciones en las
que el presidente Nicolás Maduro amenazó con cárcel a los dirigentes gremiales
si no se alinean a las políticas del país, el representante de Fedeagro aclaró
que “nosotros nos alineamos a los consumidores mas no a las políticas del país
(…) Mi persona ha aparecido en pendones en Caracas como hambreador del pueblo por
decirle a los consumidores la verdad del país”.
Pestana afirmó que las colas y las
fallas en el abastecimiento de alimentos, no son problemas de distribución sino
de producción como ha sido denunciado en otros años, en los que el déficit se
cubría con importaciones, cuya inversión pasó de 1.600 millones a 10.500
millones de dólares.
El presidente de Fedeagro lamentó que
en Venezuela “las dos únicas fincas que crecen son Puerto Cabello y La Guaira,
y las demás van rumbo a la quiebra”, en tanto que instó a los productores a no
dejar de defender sus derechos y le envió una reflexión a los consumidores: “En
la vida, podemos necesitar alguna vez de un médico o abogado, pero siempre,
tres veces al día, necesitaremos de un agricultor”.
Por Fesoca, su presidente aseguró que
la zafra 2014-15 ha sido la peor en los últimos 40 años, por la disminución de
la producción de caña, de las que -calcula- se quedarán en el campo unas 500
mil toneladas por falta de equipos para arrimarlas a los centrales azucareros
que por parte del sector privado han trabajado relativamente bien, a diferencia
de los manejados por el Estado que no van a llegar ni a la mitad de lo
procesado el año pasado.
“Estamos luchando por un país,
por la producción nacional, por la comida del venezolano y que se produzca en
nuestro propio territorio. No tiene sentido que en estos momentos estemos aquí
cuando deberíamos estar en el campo, pero no nos dejan otro remedio. La
intención no es enfrentarnos ni luchar contra nadie, sino reivindicar nuestros
derechos y los de las miles de familias que viven en la zona rural y necesitan
de los productores para sustentar sus vidas”, expresó Álvarez.
En representación de los gremios
regionales, Ramón Elías Bolotín, presidente de PAI y directivo de Fedeagro,
llamó la atención sobre la imposibilidad de acometer un ambicioso plan de
siembra de maíz, con bajos niveles de inventario de insumos que debieron estar
en manos de los productores en el mes de marzo, ante la cercanía de la entrada
del período de lluvias, entre finales de abril y principios de mayo.
“Ya nos bajaron la banderita.
Comenzaron las lluvias en Portuguesa y Barinas y con 30% de los insumos en
nuestros galpones, es poco lo que podemos hacer. Queremos producir en Venezuela
y sustituir esa agricultura de puertos que tanto hace daño, pero de nada vale
arrancar la siembra con semillas y fertilizantes si no tenemos los herbicidas.
No queremos hacer un cultivo que después no nos permita pagar los gastos ni
tener rentabilidad”, aseveró.
Juan Fernando Palacios, presidente de
Asoportuguesa, urgió en la necesidad de que el precio del maíz se fije pronto y
no cuando esté avanzada la cosecha, y menos a través de un subsidio como se
hizo con el arroz del ciclo norte-verano y que ha sido cancelado con notable
retraso.
En medio de la asamblea, unos
productores arrojaron arroz desde el elevado del sector La Flecha, para
simbolizar lo poco que vale actualmente el rubro. Hubo quienes pidieron a los
dirigentes gremiales que insten al Gobierno a frenar la “especulación” en el
monto que ciertos transportistas cobran por la movilización de insumos y la
cosecha, mientras algunos destacaron que es momento de salir a la calle a hacer
valer sus reclamos, como lo han hecho colegas de otros países de Latinoamérica
y el mundo.
El experimentado agricultor Waldemar
Cordero dijo que si “quiebra la agricultura, quiebra todo el país” e invitó a
todos los sectores de la sociedad a unirse a la manifestación que realizarán
los agricultores el próximo miércoles 29 en Caracas, llamado que también
realizaron Julio Bustamante y Bernard Geraud, mientras que Remo Mogno,
presidente de Asopruat, insistía en el “enorme esfuerzo” que realizan los
trabajadores para seguir en el campo, para así ponerle punto final a la
asamblea que culminó con una caravana por Acarigua-Araure.
